¿Eso es una Viper con los Zeiss DigiPrimes?

Lo de Burum es una pena, como lo de Allen Daviau (también retirado con sesenta y pocos) o lo de Roizman o Willis hace unos años. A lo mejor De Palma lleva a Zsigmond en su lugar, que a sus casi 80 años sigue incombustible.

Cuando ví "Misión Imposible" en su momento, me defraudó muchísimo, pero un reciente visionado HD me ha hecho cambiar de opinión y ahora la veo como una muy buena película de género, e incluso está rodada por De Palma con muchísima personalidad. La foto de Burum es estupenda, muy clásica pero a la vez muy atractiva, y es mucho mejor que la de "Los Intocables", sin ir más lejos:

MISIÓN IMPOSIBLE (MISSION:IMPOSSIBLE, BRIAN DE PALMA, 1996): Renovada adaptación de la serie televisiva de los años 60, en la que el equipo liderado por Tom Cruise ha de averiguar cuál de sus miembros es el infiltrado que provocó la muerte de varios agentes en una misión en Praga. Para que éste se delate, intentan hacerse con una lista que contiene los nombres de los agentes secretos de la CIA, aunque tengan que robarla de la propia sede gubernamental protegida con extraordinarias medidas de seguridad. Brian De Palma –que ya había tenido un gran éxito con un producto similar como “Los Intocables de Eliot Ness” (1987)- fue el director escogido por Tom Cruise y Paula Wagner, su socia en las labores de producción.

De Palma, con un gran margen de maniobra, se llevó consigo a su director de fotografía habitual, el californiano Stephen H. Burum, en la sexta de sus ocho colaboraciones conjuntas. El trabajo de Burum, que incluye localizaciones en Praga, Londres, Utah, Chicago y el estado de Virginia, no podría ser más vistoso. La película comienza con unos espléndidos exteriores nocturnos en la capital checa, en la que Burum emplea múltiples unidades de iluminación en los fondos, abundante humo y colores azules para crear una escena tan compleja como atmosférica. Su aproximamiento en ningún momento resulta natural, pero sí tremendamente vistoso y cinematográfico.

Sus interiores nocturnos siguen los mismos planteamientos, con mezclas de luces duras sobre el decorado y luz suave sobre los actores (y en el caso de todos y cada uno de los primeros planos de Emmanuelle Beart, filtros difusores). Aunque Burum coloca lámparas y otros tipos de fuentes de luz en los decorados, en todo momento es perceptible que las mismas no son la fuente de iluminación real de las escenas. Aunque los niveles de luz que emplea son altos (lo suficiente como para emplear lentes zoom en formato panorámico anamórfico, cuya apertura mínima es de T/4.5), la existencia de fuertes contrastes entre zonas de luz y sombra, así como colores intensos y saturados, hacen que las imágenes siempre resulten vivas y atractivas.

Pero si por algo destaca la película, es por la fuerza y garra que De Palma imprime con su cámara. Además de coregrafíar complejas secuencias con hábiles montajes paralelos (como por ejemplo la citada escena inicial), el director se muestra especialmente inspirado a la hora de aplicar ángulos inclinados (dutch angles) para crear tensión, zooms para acercarse en primer plano a sus personajes, cámaras lentas para ralentizar acciones o lentes bifocales (split diopters) para enfocar de manera simultánea primeros planos y fondos, dotando a la película de una gran agilidad e inteligencia en las puesta en escena. De hecho, en una época en la que prevalecen productos comerciales rodados sin personalidad alguna, la forma en que De Palma encaró una película de encargo como al presente es digna de admiración, ya que el cineasta se plegó al argumento descrito por el guión sin renunciar a ninguna de sus técnicas favoritas como director, de las que “Misión Imposible” es un gran compendio.

Fotografía de segunda unidad de Ernest Day [BSC]. Panavision.