Yo aún recuerdo el pase de cine en el que vi El árbol de la vida, lleno a rebosar, y plagado de chicas jóvenes, seguramente tentadas a ir al cine por la presencia, muy bien usada en la carátula, de Brad Pitt. Así que así, sí creo que se puede vender la película recurriendo a sus estrellas (que también son buenos intérpretes, ojo). Vale que tal vez luego el boca oreja haga que este tipo de espectador huya del cine, por mucho Pitt que salga, pero puede dar buenos resultados al principio del periodo de exhibición.
Saludos