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James Mangold es un director con altibajos. Combina buenas películas como Copland, El tren de las 3:10, Walk the line… con otras de calidad más discutible como Kate y Leopold o Knight & Day.
Pero si algo ha demostrado es que se siente muy a gusto y que se le da realmente bien el género del Western.
Logan es una película que es a la vez un Western crepuscular y una “Road movie”, ligeramente inspirada en el magnífico comic escrito por Mark Millar y dibujado por Steve McNiven. Si bien Mangold tiene varios referentes en mente a los que homenajea sin complejos, el más claro sin duda es “Shane” (Raíces Profundas), que está muy presente en la trama, aunque se pueden rastrear algunos otros homenajes a “Mad Max” o a “En la carretera” y en menor medida a “Sin perdón”, que tal vez es el mayor acercamiento al comic de Millar de todo el metraje.
Con esta película Hugh Jackman quería sin duda quitarse la espinita de las mediocres películas anteriores en solitario de un personaje por el que siente una gran gratitud y a la vez despedirse por la puerta grande de un personaje que ha estado interpretando durante más de diez años. Para ello, y con la complicidad de Mangold en la dirección y el guión (ayudado por un par de guionistas más) y sin las injerencias habituales de la productora de turno, se pone en la piel de Logan por última vez regalándonos una magnífica película, violenta, áspera y con grandes dosis de melancolía y humanidad.
Y es que Logan en esta película es uno de los últimos mutantes vivos sobre la tierra en un futuro indefinido no muy lejano, un personaje cansado de vivir, enfermo, cuya única motivación para seguir adelante es un avejentado y también enfermo Charles Xavier, en otro tiempo uno de los mutantes más poderosos de la tierra, ahora convertido en un viejo demente y dependiente totalmente.
Pero su vida da un giro cuando aparece una misteriosa chica que es un eco de sí mismo, una mutante que parece tener en común con él más de lo que le gustaría, una carga más que no quiere asumir.
A partir de estos mimbres Mangold traza un retrato lleno de melancolía, de culpas pasadas, de esperanzas y a la vez de desengaños, con personajes que lejos de ser los monolíticos héroes unidimensionales de muchos de los productos facturados actuales, tienen sentimientos, son imperfectos, sufren y se cuestionan sus actos pasados y presentes.
Mangold parece querer alejarse de los productos anteriores sobre mutantes y hacer una película independiente de la continuidad, preocupándose de ella lo justo, pero con un evidente distanciamiento.
Por supuesto también hay acción, no deja de ser una película de seres con poderes, una acción muy bien realizada y en la que sobresale la que está protagonizada por la chica, Laura o X-23, una “Lobezno” sin filtros, salvaje y violenta, fruto de un experimento realizado por los malos de turno en la que había otros niños implicados.
En este apartado, el de los actores, aparte de la excelente elección de Dafne Keen interprentando a Laura, tenemos a un Patrick Stewart y a un Hugh Jackman que dan el do de pecho, sobre todo el primero, con una estremecedora interpretación de un Charles Xavier en las últimas, una interpretación enorme que merece todos los aplausos que se le puedan dar.
Si bien, todo no es perfecto y los villanos de la función cumplen pero son simplemente funcionales y la película aunque muy bien resuelta no es un producto con un gran presupuesto, lo que se puede notar en algunos aspectos que no empañan el resultado final en absoluto.
En definitiva, ojalá las películas sobre superhéroes, mutantes o lo que sean, fueran tratadas con esta seriedad, sin la falsa pomposidad y gravedad de otras producciones, y se le parecieran el algo a esta magnífica película, una que merece estar en lo más alto de las mejores que se han realizado sobre un personaje nacido en las viñetas.
Sólo apuntar por último que creo que es totalmente recomendable verla en versión original para escuchar la estremecedora voz de Patrick Stewart o ciertos diálogos en castellano que no sé cómo habrán resuelto con el doblaje.
Última edición por OscarBC; 01/04/2017 a las 23:30
“...welcome to my house. Come freely. Go safely; and leave something of the happiness you bring.”