Infantilismo a tope.
En fin.
Yo sigo diciendo que contra el vicio de pedir, está la virtud de no dar. Y cada uno es libre. Uno de pedir el oro y el moro, y otro (el que pone el dinero encima de la mesa), de hacer números y perspectiva de éxito o fracaso y ver si le compensa, y decidir en función de eso.
Y los números son objetivos, y en el caso de Nolan, muchas perspectivas de éxito tiene que tener para que compense.
Luego ya se verá si acierta o no (me refiero a los números).