Yo, es que ya hace tiempo que no frecuento estos auditoriums... a decir verdad desde que noté que si no llevabas la Visa Oro en un sitio bien visible y decir al entrar que te había costado bastante encontrar sitio para aparcar el BMW, pues como que te trataban con bastante cara de asco.

Ahora veo los cacharros como puras herramientas y como ya conozco mis gustos (y debilidades), pues ya voy a piñón fijo cuando necesito cambiar algo.

Un saludo del Oso