Es la opera prima de Jesús Ponce, y cuenta la historia de la vida diaría de una mujer (Isabel Ampudia) que acaba de salir de la cárcel y se reencuentra con un viejo amigo drogadicto (Sebastián Haro) que se gana la vida de "aparcacoches".

Las interpretaciones de ambos son magníficas y la película, como dije antes, una maravilla. Para mi opinión injustamente olvidada en la última edición de los Goya (aunque Isabel Ampudia si estuvo nominada) y desde luego, una película que ha pasado por las carteleras, de manera muy injusta y como tantas películas españolas, sin pena ni gloria.

Un saludo.