Lo más lamentable de todo es cuando una remasterización o reedición reemplaza a los originales, por no decir suplanta, y no le dan la oportunidad al comprador de elegir qué copia llevarse a su casa. Con Amadeus no existe otra versión en alta definición que el montaje del director.
Pero voy a seguir centrándome en lo que tiene que ver con la imagen de la película y dejar el tema montaje que es otro asunto que tiene tela. Yo creo que las remasterizaciones “molonas” atraen al comprador porque si ven Remasterizada digitalmente en la carátula pensará:
-¡¡Ostras!! pero si yo tengo la que se ve vieja… ¡me la pillo otra vez!
Y así acumularemos una misma película en 5 ó 6 ediciones más.
Vamos con ejemplos de otras artes. Los egipcios también pueden decir que las pirámides son suyas y por tanto pintarlas de azul de Prusia justificándolo con un manuscrito supuestamente encontrado recientemente y atribuido a Tutantiti V de Egipto y I de Armenia donde dicen que eran originalmente así, comercialmente también podría funcionar. En Borja la restauración ha resultado esencial para que la gente visite el pueblo.
Aquí vemos la versión de cines de Cristo y la copia remasterizada al lado:
Un excelente trabajo, creo que Mel Gibson está desde hace unos años trabajando en una remasterización de La pasión de Cristo donde está borjizando digitalmente el rostro de Jesús.
Volvemos al cine, con Rocky tenemos otro buen ejemplo.
Copia con grano cinematográfico y tonalidad cálida:
Copia remasterizada (donde se han cargado el grano y han decidido que ahora mola más con tonalidad fría):
Lo cierto es que parecen días distintos.
Cuando cambias los colores de una obra, puede pasar esto:
Afortunadamente esa escultura del San Jorge de Estella creo que la han limpiado.
Por cierto, cualquier título más que conozcáis con remasterizaciones donde se inventan unos nuevos colores, hacedlo saber. En la mayoría de ocasiones prefiero ver cómo era el original si voy a ver una determinada película por primera vez.