Efectivamente, el citado flashback de Noche de circo tiene una atmósfera pesadillesca, que Bergman recrea mediante la textura fotográfica, el uso de la música y lo agobiante que resultan las burlas de los soldados.

Respecto al personaje de la mujer del dueño del circo, el director pone de manifiesto una visión sorprendentemente moderna y liberadora de la mujer, lejos de ser un personaje sumiso como era habitual en el cine occidental de la época, para nada dependiente del hombre y con las ideas bastante claras.

Saludos.