En primer lugar, me encantan estos temas que dan tanto juego

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Leone, no matéis, no es precisamente santo de mi devoción, pero al le debo una de las películas que más me han impresionado en mi vida. Ni spaguettis, ni peplum, ni nada que ver con el cine que más famoso le hizo: ADORO a rabiar ÉRASE UNA VEZ EN AMÉRICA. Me parece una obra maestra incontestable, hermosísima, dura, un canto a la codicia y, porque no, a la amistad bien y mal entendida. Y no me matéis nuevamente, pero me gusta más (insisto, no me juzguéis mal

) que El padrino en cualquiera de sus "versiones".