Por cierto, Deathtrap está basada en una obra de teatro (¡otra más en la filmografía de Lumet!) de Ira Levin, el autor de la novela adaptada por Polanski en Rosemary's Baby. Cuando la vi hace años no me gustó, aunque Caine es siempre una garantía, y sorprendía ver a Reeve en un papel de comedia negra (para mí, ambos estuvieron mucho mejor años después en Noises Off, de Bogdanovich).