
Iniciado por
Sargento McKamikaze
Desde que escribí ese post comprendo a lo que te refieres, Toshiro: sin embargo, el Solaris de Lem juega tanto con la relación de lo inalcanzable, desde lo más íntimo -esa copia de Harey perfecta, tanto que no es ella- hasta la divinidad que mencionas -Solaris, Dios, humano planeta-. Seguramente aún no haya tomado conciencia plena de la segunda connotación, pero de la primera estoy seguro que Soderbergh sabe adaptarla -y lo mejor de todo, así mismo- con singular maestría.