Yo me percaté desde el primer momento de la enfermiza planificación, rigurosas composiciones (cada elemento tratado de forma individual en cada encuadre de cada plano), sumisión al target, celebración pulp en tono y libretos, arrojo discursivo y estimulante dirección (sin ir más lejos, lo que Lucas hace con los cielos de AOTC es una ponencia en subtexto visual) en cada una de las precuelas. Los posteriores análisis y el ceñudo estudio pormenorizado posterior solo afianzaron esas primeras impresiones con aún mayor contundencia.
Hoy día, Disney/Kennedyfilm no tienen absolutamente nada que ofrecerme, solo desolación, tristeza, mediocridad (casi siempre desde el fan service barato) e incompetencia (no salvo uno solo de sus productos. Si acaso, los tres episodios sobre Dooku de "Tales of the Jedi" y la Season Finale de la segunda temporada del Mandaloriano por la honestidad en el control de daños) que sus propios mentideros patrocinados intentan, infructuosamente, presentar como mínimamente relevantes. El presente es vulgar y ofensivo. El futuro es irrelevancia y una eterna huida hacia ninguna parte.