Sobre todo los "malos", que no me han resultado suficientemente poderosos y amenazadores como en la Trilogía Clásica.
El respeto que imponía , y el acojone que causaba "Darth Vader" no tiene nada que ver con el del hijo de Han Solo. En un principio cumplía con el papel de forma "correcta", (sin llegar al nivel de Darth Vader en ningún momento), pero a partir de quitarse la máscara, cae en picado su imagen de malo, y mucho más cuando se le resiste la futura Jedi, que sin entrenamiento alguno de ningún tipo, resulta casi superarle. (por cierto, lo que me ha sorprendido es el potencial de esta nueva Jedi, que parece que supera al de todos los anteriores maestros).
Así que mucho tendrá que evolucionar el hijo de Han Solo en el resto de su entrenamiento, para ser un rival a la altura del potencial de la nueva Jedi. Esto, bajo mi punto de vista, le resta mucha emoción a la peli. Nada que ver con la diferencia que se vía entre Luke Skywalker y Darth Vader.
En cuando al "sucesor" de Darth Sidious, tampoco me ha parecido estar a la altura. Aún presentando más deformaciones en el rostro, y en el holograma aparecer con un tamaño mayor, la verda es que Darth Sidious, con la capucha, que dejaba entrever sus ojos inyectados en sangre y odio, me parecía que causaba mas miedo y respeto.
Otra cosa que me ha decepcionado es el volver a repetir el mismo esquema argumental del episodio IV, y VI (cambiando la Estrella de la Muerte, por la base situada en el planeta), y además que todo sucede demasiado deprisa.
También me ha cabreado que Luke Skywalker solo aparezca un poco al final, y no hable nada, y encima quitan a Han Solo del medio, aunque supongo que si esto es tal cual en la novela, pues acepto pulpo como animal de compañía....