Yo creo que los que hemos vivido esta época de los 80, y quizá los que no la hayan vivido, de ver tanto cine y series de tv no nos asombra tanto, digamos, la puesta en escena como ambiente puesto que sabemos cómo puede discurrir la trama.
Antes era novedoso, me explico, primeras películas al verlas asombraban, pero una tras otra ya esa novedad o supuesta novedad no causa tanta impresión, dejando de lado si tal serie es buena o no tanto.
Sin embargo, vistos ayer tres epidodios de golpe, a mi particularmente me ha encantado, si bien las voces de los críos aplicadas a los mismos son algo como que no se llegan a corresponder con ellos. He visto series y películas cuyas voces de chavalines causan asombro de lo bien que se interpretan.
La interpretación de la protagonista también se ha visto en muchas películas ante la desesperación de lo que acontece en esta serie, pero vamos, que nunca se nos va a ofrecer un producto al 100 por 100 perfecto, como en su momento Revolution pintaba bastante bien y la serie no continuó a más de dos temporadas por la decadencia de lo que existe en ella, que bien podría haber acabado sin lo que seguramente muchos compartiríamos si se abriera un tema en relación a ello.
Volviendo a Stranger Things, desde luego hoy veré otros tres episodios y más contento y alegre me he quedado al leeros sobre la existencia de una segunda temporada. Ojala no se desmarquen de esas tramas (no sé cual puede ser realmente la causa) de lo acontecido en estos tres impresionantes capítulos, puesto que si bien me encantaría no se tornara excesivamente larga como otras con sus episodios de relleno, sí concluyera con unas más que aceptables temporadas.
Yo repito, prefiero poquito y de calidad que no mucho y aborrecer la serie por pesadez.