Campanilla, excelentes comentarios los tuyos sobre esta maravilla de Anderson.
Me quedo sobre todo con tus alabanzas a Desplat y lo que indicas de escenas de cine mudo. No me había percatado de eso, pero sí, hay momentos que son cine mudo y que están excelentemente rodados: la escena del monasterio, la escena del museo... y como dices, destacan estos momentos por:
Anderson parece que mide perfectamente cada escena, su ritmo y sus elementos visuales. Y hay también que destacar la geometría de sus planos, como se puede apreciar en este vídeo:Porque ese es otro punto fuerte de Anderson: domina como pocos el ritmo escénico. En esta ocasión es, como decía antes, absolutamente vibrante.
repleto de planos simétricos (está sin sonido)
Saludos