Acabada de ver, efectivamente, parece que, tal como indica Twist, el tono de farsa es algo que se ha pretendido poner en pantalla. Sin recordar casi nada de mi lectura infantil de la obra (en una versión además creo que reducida), a mí esa reelaboración me ha funcionado por su ritmo y tono disparatado.

Pero lo mejor creo que es que ha provocado que tenga ganas de leer de nuevo la novela.

Saludos