Pues ese giro es lo mejor de la película, alejándose del tópico villano sabelotodo y que siempre va por delante del héroe que se ha puesto tan de moda estos últimos años. A ello hay que sumar la crítica a la política exterior estadounidense y el uso de los medios de comunicación hoy en día.
La peli tiene bastante más chicha que el promedio del género.