Russel Edington es un gran villano. Tras haber sido tostado, fundido en plata y enterrado en cemento, no creo que haya dicho la ultima palabra. El muy cabrón sonríe y hasta se permite la licencia de hacer bromas y dinamitar relaciones personales mientras suspira por sus ultimos momentos de vida. Su escena como narrador de las noticias es impagable, donde le arranca el corazón al presentador, es impagable. Su discurso pone los pelos de punta cuando explica la simbiosis entre vampiros y la sociedad americana. Otra de las escenas memorables es cuando se carga al magistrado, tras haberlo obligado a prestar sus servicios como sacerdote exprés y reconocer que su bastón pertenece a Andalucía. Excelente interpretación de Denis O'Hare.
También sorprende la aparición de Franklin Mott (interpretado por James Frain de "Los Tudor") un vampiro con acento británico cuyas intenciones, así como procedencia, no quedan claras, pero que sabemos que está más zumbado que Joaquin Phoenix en sus momento de "lucidez". Resulta realmente inquietante y la pobre Tara parece un imán para los problemas. Menos mal que Jason le da matarile con sus "célebres" balas de madera.
Veremos en que acaba todo el lío entre Eric y Bill, ya que realmente Alan Ball ha conseguido que no sepamos por quien decantarnos. Ni siquiera la pobre Sookie lo sabe ante las ¿oscuras? intenciones de Bill que son reveladas por Eric, lo cual hace que nos remontemos hasta los primeros espisodios de la serie.