La fotografía es espectacular, muy estética. Yo respecto a la peli original tengo muchas reticencias, tal vez porque la he visto muchos años después de ser estrenada (la vi por primera vez en 2020), pero me parece que ha envejecido mal, tanto a nivel argumental, interpretativo, y estético. Es la sensación que me dio al verla.
Por supuesto habrá gente que le encante, para gustos los colores está claro.




LinkBack URL
About LinkBacks
Citar




. Las suites sinfónicas, tanto como las suites orquestales de ballets y operas (Peer Gynt, Spartacus, Pájaro de Fuego, y tantas y tantas) me parece un ejercicio de deconstrucción de una obra, en la que se pierde entre otras cosas su coherencia, se suelen dejar por el camino muchos momentos musicalmente imprescindibles, así como desaparece una experiencia vital completa. Hay excepciones, claro, pero eso es otro asunto. En este caso, lo veo más grave si cabe al prescindir del elemento vocal básico. Como ejercicio de orquestación, como bien comentas, están hechas con maestría, pero se deja de lado muchos puntos culminantes, muchas progresiones se ven recortadas, y la orquestación masiva y tan elaborada, a mi entender, suaviza los cantos áridos y los excesos tímbricos (podría parecer un sin sentido cuando vengo de defender la versión del 61 frente a la del 57, pero en esta comparativa hay otras razones). Es como cuando a la canción de Solveig le quitas la voz. ¿Qué no hay más remedio? Bueno, pues por eso no me gustan. Del mismo modo, la versión operística me produce el mismo efecto que comentaba pero multiplicado. No voy a entrar en lo adecuado o no de las voces, pues incluso dentro del mundo operístico también habría que hablar de lo adecuado o no de elegir a Carreras y a la Kanawa. Pero eso es otro asunto. En definitiva, me parecen experimentos que desvirtúan más que generan vivencias inolvidables, y no van conmigo. Para mí restan al original, y no suman experiencias enriquecedoras. Pero, es un punto de vista muy personal.
