Aunque me encantan Herrmann, Rota y otros más, cada vez valoro más la ausencia de música en un film y en cambio me atrae más el trabajo con los efectos de sonido en las bandas sonoras. Un punto intermedio podría ser la simbiosis de Badalamenti y Lynch.
En cambio, temas como el de Lara en Doctor Zhivago, que he visto esta mañana, claro ejemplo de leitmotiv, me acaban resultando empalagosos.