Los remakes se llevan a cabo precisamente por ser un éxito en su tiempo el original. Y vuelvo a recalcar que cualquier gran novela o relato merece ser adaptada cuantas veces sean. Otra cosa es que gusten más o menos. ¡Anda si se hubieran quedado en Nosferatu y punto! ¡Menudas maravillas me habría perdido yo! (hablo por mí, ok).
Ah, y si un remake resulta un mojón, el original no tiene culpa de nada. Faltaría plus.