Después de haberme dedicado al cine documental y de haberme asombrado con "Nanook, el esquimal", regreso al cine cómico.

Ahora me pongo a visionar el filme "Pasión y boda de Pamplinas" del año 1920. Fue el primer largometraje de Buster Keaton. Es más bien distinto de los demás filmes a los que tenemos acostumbrados.

Tiene algunas secuencias divertidas, pero con un ritmo más lento y casi nada de acción. Se desarrolla en Nueva York, en el mundo de las finanzas. Es una especie de cine cómico para adultos, pero resulta apasionante.