Pues no exactamente, no?...Entronca más con picnic en Hanging rock...¿Puede tener algo de ¨babydoll¨?..no...Baby Doll es más Sally Mann. Estas son más clase media, lo otros son, más arrastrados..
Y por la parte de ¨Splendor¨, virgenes suicidas?...Yo creo que si la protagonista fuera Juanita, más o menos...Los personajes son disstintos.
Última edición por C.Bethencourt; 11/01/2021 a las 20:39
A ver si esta noche me puedo poner un rato con el comentario. No puedo estar demasiado tiempo delante del ordenador por (auto)prescripción facultativa. Es curioso. No pensaba que una aparentemente inocente película como ESPLENDOR EN LA HIERBA iba a generar tanto debate. En mi caso siempre la había considerado una de mis películas de cabecera pero lo cierto que su último visionado me ha decepcionado. Pero es lo natural, como bien dice mad dog earle, nuestras percepciones cambian con los años y tampoco hay que rasgarse las vestiduras.
Una escritora, no me acuerdo ahora quién, decía que la primera vez que leyó ¨Rojo y negro¨ se enamoró de Julien Sorel, la segunda vez que la leyó, lo odió, y la tercera sintió pena y ternura por él...
Yo creo que este film admite muy bien este tipo de experiencia cambiante con la edad...No le cierres la puerta a una revisión dentro de...20 años?
Y los estados de ánimo. Hace cuatro años, sufriendo yo del maldito tinnitus que me tenía patas arriba, me ví "Nacido el 4 de Julio" y "Snowpiercer" (Rompenieves) y me sentí fatal durante el visionado; el film de Oliver Stone por supuesto ya lo había visto anteriormente un par de veces y no me había puesto patas arriba con esa intensidad, ni de lejos. Respecto al film del coreano Bong Joon Ho, es que me sentí "dentro de ese infernal tren", yo era un personaje más en el vagón de cola atrapado sin visos de más allá de aguantar. Me cambió la vida en 2017.
Mi comentario no va a ser más que una simple expansión de lo ya comentado anteriormente.
Yo creo que me situaría en un término medio.
Una de las cosas más frustrantes de un cinéfilo es que algunos títulos que los teníamos como ejemplares y por los que sentíamos gran devoción ahora les vemos las costuras. O nosotros mismos las creamos.
Pero también sucede lo contrario.
En el otro rincón el visionado de mi primera película de Yasujiro Ozu ha sido toda una revelación.
Así que una cosa se compensa con la otra.
15. SPLENDOR IN THE GRASS (1961, ESPLENDOR EN LA HIERBA)
Director: Elia Kazan.
Producción: Newtown Productions, Inc. / NBI Company
Distribución: Warner Bros. Pictures, Inc.
Guion: William Inge.
Diseño de producción: Richard Sylbert.
Fotografía: Boris Kaufman (en Technicolor y formato panorámico (1.85:1)).
Música: David Amram.
Montaje: Gene Milford.
Reparto: Natalie Wood (Wilma Dean “Deanie” Loomis), Warren Beatty (Bud Stamper), Pat Ingle (Ace Stamper), Audrey Christie (Señora Loomis), Barbara Loden (Virginia “Ginny” Stamper), Zohra Lampert (Angelina), Fred Stewart (Del Loomis), Joanna Roos (Señora Stamper).
Duración: 2 h 03 m 55 s.
Rodaje: desde el 9 de mayo hasta mediados de agosto de 1960.
Estreno: 10 de octubre de 1961.
No deja de ser curioso que el fragmento más bello de la película, o al menos el que todos recordamos de la misma, sea perfectamente aplicable, al menos en mi caso, a la misma...
Oda a la inmortalidad (1807), de William Wordsworth
Aunque el resplandor que
en otro tiempo fue tan brillante
hoy esté por siempre oculto a mis miradas.
Aunque mis ojos ya no
puedan ver ese puro destello
que en mi juventud me deslumbraba.
Aunque nada pueda hacer
volver la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos,
porque la belleza subsiste siempre en el recuerdo.
En aquella primera
simpatía que habiendo
sido una vez,
habrá de ser por siempre;
en los consoladores pensamientos
que brotaron del humano sufrimiento,
y en la fe que mira a través de la muerte.
Gracias al corazón humano
por el cual vivimos;
gracias a sus ternuras, a sus
alegrías y a sus temores, la flor más humilde al florecer
puede inspirarme ideas que, a menudo,
se muestran demasiado profundas
para las lágrimas.
Como bien indica el siempre atento mad dog earle hasta la revisión anterior (la sublime RÍO SALVAJE, que parece haber pasado con más pena que gloria por este foro...) tenía a ESPLENDOR EN LA HIERBA como el tercero de los grandes títulos de su director (a falta, eso sí, de ver sus obras postreras) y así lo había proclamado en repetidas ocasiones…
Sin embargo, después de la última revisión (y en mi caso ya van varias) he de admitir que, al menos para mí, ha perdido buena parte de su encanto y quizás no sólo por ese cambio de percepción que nos supone el paso de los años sino también, por qué no, debido a que la película, en el fondo, no era tan buena como la recordaba.
Ya dije que lo mejor de la misma y con diferencia es el personaje de Deanie y la actriz que lo encarna, la maravillosa (y prematuramente desaparecida) Natalie Wood (1938-1981).
También dije que nunca me gustó Warren Beatty (1937) como actor aunque sí, por lo poco que he visto, como director. Sin embargo, sí me gusta su personaje. Una cosa no tiene por qué implicar la otra.
Creo igualmente que los personajes (ojo, no los actores que los encarnan) del señor Stamper (Pat Ingle, que ya había ejercido de narrador al principio de RÍO SALVAJE) y su hija, la casquivana Ginny (Barbara Loden, a la que también habíamos visto en el papel de secretaria de Montgomery Clift en la citada película), son meras caricaturas, especialmente la segunda, que como bien mencionáis en vuestros comentarios desaparece sin más en la segunda mitad de la película después de que Inge y Kazan la tomaran, siquiera brevemente, como centro de la narración en la primera.
Por el contrario, los personajes (y las actrices que los encarnan) de las señoras Loomis (Audrey Christie) y Stamper (Joanna Ross), son, junto a Deanie/Wood, lo mejor de la función.
También me gustaría mencionar al señor Loomis (Fred Stewart), demasiado oscurecido por el personaje de su esposa, pero que tiene su momento mágico cuando revela a su hija el paradero de Bud. Un gesto tan aparentemente sencillo pero tan hermoso que todavía me sigue emocionando.
- También ayuda la música de David Amrad, que yo encuentro desigual pero que tiene un poderoso tema principal, muy romántico y melancólico, que me recuerda en parte al de esos otros dos títulos que siguen siendo para mí sus obras mayores… -
Al igual que me sigue emocionando, ya lo siento amigo Earle, el momento en el que Deanie es obligada por su profesora a leer el bellísimo poema de William Wordsworth (1770-1850).
El mayor problema es que al texto (original) de William Inge (1913-1973) que antes me parecía modélico ahora le veo las costuras.
- Un Inge, por cierto, al que podemos ver encarnando al reverando Whitman (¿acaso un guiño al también poeta Walt Whitman (1819-1892)?), en una escena, por cierto, que me encanta, con esa mirada que le lanza al mostrenco del padre de Bud. -
No sé por qué pero viendo (o en mi caso, volviendo a ver) la película me vino a la cabeza un título coetáneo del cine de aventuras como es la espléndida versión que de la novela corta “Billy Budd, marinero” (1924) de Herman Melville (1819-1891) – sí la fecha es correcta, se publicó póstumamente – firmó el actor (y ocasional director) Peter Ustinov (1921-2004) denominada en nuestro país LA FRAGATA INFERNAL (1962).
Quizás porque en ambas el tema central es la imposibilidad de que un ser inocente pueda sobrevivir en un mundo donde el egoísmo y la crueldad campan a sus anchas.
Ya lo decía Cat Stevens…
Oh, baby, baby, it’s a wild world
It’s hard to get by just upon a smile…
Aunque ahora pueda parecernos increíble el hecho de que una pareja de jóvenes (menores de edad (legal)) pueda destruirse por el mero hecho de ser incapaces de llegar hasta el final en sus encuentros amorosos, lo cierto es que ambos encarnan el ideal romántico imperante en nuestra sociedad al menos hasta la primera mitad del siglo XX.
La misma actriz encarnaría a la igualmente virginal María (el nombre lo dice todo…) en la deliciosa WEST SIDE STORY (1961) de ese mismo año.
Quizás el contraste es demasiado fuerte entre la pureza de los sentimientos de la pareja (a pesar de sus claros (y naturales) deseos sexuales) y la corrupción de los personajes que les rodean.
Y como antes decía, chirrían demasiado los personajes del padre y de la hermana de Bud, no así el de la madre quien, pese a tener poca presencia en pantalla, siempre se muestra amable y cariñosa.
Ya ha salido a la palestra el nombre de Douglas Sirk (1897-1987), uno de los grandes maestros del melodrama de todos los tiempos, y lo cierto es que uno de sus títulos clave, ESCRITO SOBRE EL VIENTO (1956), no deja de tener numerosos puntos de contacto con la película hoy comentada.
De hecho, escenas como las que allí protagonizaba la bellísima Dorothy Malone, la igualmente casquivana Marylee, parecen haber sido calcadas por Inge/Kazan, para el personaje no sólo de Ginny sino también el de su padre, puesto que ambas féminas comparten el mismo carácter alegre y desenfrenado y porque además Ace se pasa toda la película acariciando esa figura en forma de pozo de petróleo de carácter claramente fálico (y como bien dice mad dog earle, una nada velada alusión a su (in)disposición sexual) como hacía la primera al final de la película, pero con un carácter mucho más perturbador en este último caso.
De nuevo el perdón, el de los hijos a los padres que era (en mi modesta opinión) el tema central de AL ESTE DEL EDÉN, resulta central en esta película.
Sin embargo, aquí está mucho menos desarrollado y además y pese a lo manifestado por el propio director (y aquí estoy de nuevo de acuerdo con mad dog earle), el final de la historia no me parece tan hermoso como el de AL ESTE DEL EDÉN (o el de RÍO SALVAJE, ya lo siento) aunque sí, eso hay que reconocérselo, más maduro.
He dejado para el final lo que para mí convierte todavía el visionado de la película en algo especial.
Por supuesto, me estoy refiriendo a Deanie/Natalie Wood.
Ya dije en su momento (¿verdad amigo Earle?) que REBELDE SIN CAUSA no era, seguramente, la mejor película de Nicholas Ray, pero sí la que más me gustaba.
Y buena parte de la culpa se debía a la pareja estelar, James Dean/Natalie Wood.
La Judy encarnada por la actriz en la película de Ray bien podría ser el alma gemela de la Deanie de ESPLENDOR EN LA HIERBA.
Sin embargo, si la primera logrará alcanzar la felicidad en brazos de Jim, no le ocurrirá lo mismo a la segunda.
La joven actriz logra moldear de manera sublime a un personaje que pasa del idealismo de la juventud a la aceptación de la derrota de la madurez, pasando por el purgatorio que representa la sociedad en la que la ha tocado vivir.
El encanto que desprende la actriz a lo largo de toda la película es el recuerdo de lo que podría haber sido la gran película de Elia Kazan y como tal la tenía en el recuerdo (con las dos ya mencionadas…).
Incluso como decía, Natalie Wood hace parecer un buen actor a Warren Beatty (y que nadie se me desmaye), todo un mérito dado el acartonamiento natural del mismo.
Al igual que los bellos versos de Woodsworth, el recuerdo de la exquisita Natalie Wood (¿Woodsworh, Wood?) siempre me hará recordar aquella otra canción de George Harrison…
All things must pass
All things must pass away…
Dulces sueños y perdonad la ausencia de capturas de pantalla pero mi rodilla no da (por ahora) para más…
P.D. En atención al querido amigo Otto+ me gustaría comentar que detesto poner puntuaciones a las películas o siquiera ordenarlas de mejor a peor (o viceversa) y sólo lo hago teniendo en cuenta el test de empatía Voigt-Kampff del querido amigo Alex Fletcher que acompaña al final de la revisión...
… lo que me conduce al susodicho listado…
Mis películas favoritas:
01. RÍO SALVAJE
02. AL ESTE DEL EDÉN
03. UN TRANVÍA LLAMADO DESEO
04. ESPLENDOR EN LA HIERBA
05. ¡VIVA ZAPATA!
06. PÁNICO EN LAS CALLES
07. LAZOS HUMANOS
08. BABY DOLL
09. FUGITIVOS DEL TERROR ROJO
10. PINKY
11. LA LEY DEL SILENCIO
12. LA BARRERA INVISIBLE
13. EL JUSTICIERO
14. A FACE IN THE CROW *
15. MAR DE HIERBA
Mis actrices favoritas:
01. Lee Remick
02. Carroll Baker
03. Peggy Ann Garner
04. Natalie Wood
05. Jeanne Crain
Última edición por Alcaudón; 12/01/2021 a las 00:24
Mi blog: www.criticodecine.es
Ya leeré con detenimiento tu crítica, Alcaudón. Mañana haré la mía, mucho más breve. Pero después del visionado de esta noche, tengo que reconocer que en la primera mitad de la película, me he irritado y mucho con algunos comportamientos. Pero también, en el todo del film, lo contemplo como algo premeditado por Kazan.
Por ello, por hacerme sentir muy diversas cosas, y ya digo, no todas positivas (pero eso es el cine), no diré que es una obra maestra absoluta (porque tiene algún que otro pero), y sin embargo, objetivamente me parece un sobresaliente ejercicio sobre pasiones, acelerones y frenos, sobre lo ideal y lo real, sobre lo que queremos y lo que quieren los demás para nosotros o por nosotros. Es como lo de "a veces, tengo ganas de ... y otras de besarte".
Ya digo, me ha despertado sentimientos encontrados y diversos. Objetivamente, llega al sobresaliente.
Mi blog: www.criticodecine.es
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Quién sabe?..A lo mejor vuelves al principio de nuevo dentro de unos años.
No se trata de mirar con condescendencia a tu yo de otro tiempo. Simplemente apunto que el film tiene esa cualidad de revisable para sentir empatía con otros personajes...Incluso la de la hermana ¨ligera de cascos¨.
Es un film, como he estado apuntando, imperfecto. Es de estructura muy arriesgada, y sin embargo, ahí está...Es lacerante...No sé, me parece un film mucho mejor de lo que pueda parecer estando con el papel y el lápiz, apuntando los Haber y los debe.
Muy grata (grata, por decirlo de alguna manera) sorpresa en este ultimo visionado.
Última edición por C.Bethencourt; 12/01/2021 a las 02:09
¡No lo sientas, hombre! El que lo siente soy yo, por no poder experimentar esa emoción. Y la culpa no es, por supuesto, ni de Natalie Wood, a la que siempre he adorado , también en Splendor... (a pesar de mi crítica del film), ni el bello poema de Wordsworth, sino el contexto: durante todo el camino al aula (cual via crucis, talmente Marlon Brando en On the Waterfront) ha de oír de fondo las risitas, comentarios a media voz y miradas burlonas de todas, pero es que de todas, sus compañeras, ya no de su clase sino del instituto. Luego, ya dentro del aula, las miraditas se acentúan, con reiterados planos sobre el rostro provocador de Juanita. La actitud de la profesora (que me recuerda la señorita Rottenmeier) todavía insiste un poco más en llevar al paroxismo a Deanie. Si con todo esto la pobre muchacha no sale corriendo como una loca, que es lo que hace, o simplemente cae desmayada... ¡Kazan/Inge, please, un poquito más de finezza!
Perfecto ejemplo de lo cambiante que puede ser un juicio sobre una película (o novela). Seguro que cada uno de nosotros podría citar un caso en el que ha experimentado este proceso. De hecho, también nos pasa a veces con las personas, incluso con las más cercanas... ¿o no?
Mi blog: www.criticodecine.es
Natalie con un lenguaje corporal durante toda la peli asombroso,muestra de todos sus estados emocionales.Al final maravillosa vestida de blanco en el rancho,qué clase qué determinación y al mismo tiempo que sentimiento,con el niño,la italiana.PRODIGIOSO!!!
El inicio cuando entra en casa y tiene que estirar todo ese cúmulo de sensaciones que lleva y luego en la cama
Me parece que he sentido exactamente lo mismo que tú. Por eso te citaba expresamente. Creo que aquí, en la linea que comentábamos hace unos días, el todo es mejor que las partes. Ya me extenderé algo más en mi review cuando la haga, pero por ahí va alguna gota de vinagre que aporto.
Mi blog: www.criticodecine.es
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Por supuesto, no sólo a las personas cercanas, incluso a tí mismo.
Hace un tiempo me vi con mi peinado absurdo ocultandome mi alopecia, con los ojos bien abiertos y una sonrisa de dientes apretados, agachando la cerviz con un cliente...Me vi como José Luis López Vazquez, personaje que hace 20 años, me parecía patético. Y en ese momento de fragilidad, donde entiendes al pelota obstinado que trata simplemente de sobrevivir, me sentí tremendamente cómodo con mi existencia...Y por supuesto, las películas de Berlanga donde él sale, ya no son lo mismo.
Joder a mi me encanta,me estais sorprendiendo,casi todas las escenas son para enmarcar,y sí.. Ginny es caricaturesca pa no serlo pobreta meua con esos padres y alrededores.
Vamos que no parece una peli de KAZAN
El camino de Deanie hacia clase después de la ruptura es digno de un instituto,pasas de salir con el líder a que te dejen tirada por la pilingui.Lo que no tolero de ese tajante es la actitud de la maestra.
Última edición por hannaben; 12/01/2021 a las 10:51