Cita Iniciado por Alex Fletcher Ver mensaje
Muy interesante film donde me reservo un futuro visionado en BD, porque se lo merece, donde Fellini nos muestra su mundo, donde no esconde el artificio de este (momento fantástico que comenta también Mad, cuando dicen refiriéndose al sol "parece un decorado) y el cutrerillo a lo Ed Wood hecho a posta, no creo que fuera por falta de recursos, simplemente lo quería así, donde el barco, que quedaría perfectamente ligado al transatlántico de Amarcord, tiene vida propia nutrido de personjes y un rinoceronte (Jodorowsky y su elefante en Santa Sangre, ya no digo más). En resumen un film disfrutable y a redescubrir.
En todo caso, sería un cutrerío de lujo, porque la inversión en decorados, vestuario y extras fue elevada (según Baxter, 7 millones de dólares de entonces, que se veía claro que no se recuperarían fácilmente). Artificio, sí, todo el que quieras y más, y sin disimular. Y ese artificio de pintar el sol, confeccionar un mar con material plástico o parirse un rinoceronte (o rinoceronta ) que no esconde su carácter de muñeco, es de lo que más me gusta del film, a años luz de los sofisticados efectos especiales a base de CGI del cine actual. Cuenta también Baxter, por ejemplo, que el barco, el Gloria N., tal como lo vemos en el puerto, era la pared de una fábrica de pasta de Roma pintada de negro, uno de los pocos elementos (quizá el único) no construidos en Cinecittà. Y añade: "la fábrica era la misma en la que Urbano Fellini [el padre de Federico] conoció a Ida Barbiani [la madre] en 1918".