Por circunstancias que no vienen al caso, he terminado como un pelele viendo esta película en vez de Pozos de ambición, que veré mañana. La había sufrido ya en casa, pero en cine la tortura es mucho mayor. Mi acompañante quería hasta abandonar la proyección, que es lo que he acabado haciendo.
Vaya basura de película. Vaya realización más pretendidamente indie, cool, guai, detallista, lúcida y reveladamente simplona. La actriz no hace más que poner caras de guai, soy más lista que el resto, soy la pera.
La película encima es tan simplona que trivializa un tema de manera algo falaz...y lo que se torna por falta de trabajo en el guión queda revelado como algo polémico y denunciable.
Una mierda, una nadería con maneras ramplonas y una película absurdamente hablada pero, sin duda, cagarrito deshecho en muy breve.
Cabreante de verdad.