Yo tampoco puedo con Wes Craven. Comunmente se le mete en el saco de reyes del terror, junto con gente como Tobe Hooper, John Carpenter o George Romero, pero no me lo parece. Sus dos primeras películas dan asco (especialmente La ultima casa a la izquierda) y despùes de hundirse en el fango de los telefilmes empaquetados, logró salir para regalarnos su mejor peli: Pesadilla en Elm Street, que queda destrozada por ese final absurdo (el punto flaco de Craven). Su otra peli bastante estimable también se ve lastrada en su final "La serpiente y el arco iris".
El resto de su filmografía se divide en pelis de serie B absurdas, que resultan divertidas porque nadie se las toma en serio, de ver y olvidar: tales como Shocker, La cosa del pantano o El sótano del miedo (esta última queda algo mejor ante las otras dos... aunque no mucho). También hay algún cutrerio como "Congelados" o la secuela de Las colinas tienen ojos. Ya en los noventa, nos "regaló" :cabreo cosas como Un vampiro suelto en Brooklyn, comedieta sin gracia al servicio de Eddie Murphy en horas bajas y sin querer reconocerlas, y algún subproducto de videoclub fuera de género...
Respecto a la saga Scream, lo tengo clarito: de la primera se salva el (brutal) prólogo con Drew Barrymore, y el delirante final con "el" asesinoque resulta desquiciantemente divertido. Esta vez, Craven no solo se toma en serio su trabajo, llenando la peli de adolescentes asesinables, y acumulando diálogos y comportamientos salidos de cualquier secuela de Viernes 13, pero no solo eso, sino que además se burla del trabajo ajeno (el cachondeo a costa de La noche de Halloween, Viernes 13 o la propia Pesadilla es constante) y convierte homenajes que gente como Joe Dante convertiría en momentos inolvidables en una sucesión de momentos de verguenza ajena. De la segunda no destacaría nada (ni el comienzo en el cine, semi plagiado de Demons de Lamberto Bava) ni nada de lo posterior... la tercera, ya sin guión de Williamson, se salva por algún agradable cameo, y sin ser una película de terror mínimamente disfrutable, si sabe cerrar el círculo abierto en la primera de forma bastante coherente.
En fin, seguiremos esperando a que Craven se gane ese trono entre los reyes del terror, que hasta ahora no ha demostrado merecer.