Pues sí, en serio, es de una crueldad extrema tirar a una persona INDEFENSA, sin poderes, prácticamente sin poder moverse, con todos los efectos de la Kryptonita, que recordemos no sólo le priva de sus poderes sino que también le afecta a sus funciones vitales. Cruel es poco. Es como si arrojaras a una persona que no sabe nadar al mar, al río o a lo que sea que no. A mí me parece terrorífico, en serio.
Con respecto al tren, volvemos a lo mismo: aunque no se vea, es de una crueldad implícita acojonante.