Sí, te agradeceré la cita. Aunque sobre algunas películas he llegado a leer interpretaciones absolutamente delirantes, la gracia está en que la interpretación sea sugerente, productiva, que abra nuevas lecturas. Hay un riesgo suplementario que ya apuntaba en mi post anterior: el paso del tiempo. Lo que hoy puede resultar claro que simboliza determinada cosa, quizá de aquí a unos años va a acabar simbolizando otra, independientemente de la intención del director (si es que tenía alguna en concreto). Durante los años 60 y 70, todo se interpretaba desde un punto de vista sexual o político (mucho digest de Freud y Marx en las lecturas que se hacían de las películas de la época, y de Marcuse y Deleuze y Foucault, etc.). Ahora, no sé si para bien o para mal, uno no sabe qué lecturas hay detrás de la mayoría de interpretaciones... si es que hay alguna.