La cosa es que no todas las opiniones tienen el mismo valor. Suena prepotente y soberbio, pero es así. Por la sencilla razón de que no todo el mundo tiene el mismo nivel de conocimiento y/o estudios sobre las mismas cosas. Por supuesto, todo el mundo tiene derecho a compartir y expresar su opinión y parecer siempre que se haga desde la educación y el respeto, sea esta cual sea.
El problema suele venir con cuando la opinión de A sobre un tema X está mucho mejor argumentada y estructurada que la replica -contraria- de B a ese mismo comentario; normalmente porque A está mucho más versado en el tema que B.
Lo que habitualmente sucede es que tras un rápido intercambio de pareceres, B confunde lo que es un refutación consistente de su argumentario -a base de lógica, hechos y datos contrastados; o a causa del bagaje cultural e intelectual de la otra persona-, la mayoría de las veces- con un ataque y menosprecio personal contra él.
Es mi opinión y has de respetarla, tiene el mismo valor que la tuya.. Y cierran el debate.