A mí lo que me sorprende es que en la época del
BD/DVD y de las descargas por Internet, de Google y la Wikipedia, de imdb y foros como este, de tropecientos canales televisivos, algunos temáticos dedicados al cine,
los aficionados al cine, por muy jóvenes que sean, se queden en la década de los 70 o se muestren reticentes al cine en blanco y negro o, ya no digamos, mudo. No hablo de quien va al cine para pasar el rato, como excusa para quedar con unos amigos y ligar a poder ser, sino de personas que se interesan por lo cinematográfico, quizá compran una revista, leen algún libro sobre la materia, participan en foros y coleccionan películas, sea en el formato que sea. En mi infancia (confieso superar los 50) el virus del cine me llegó a través de los programas dobles de los cines de barrio, en donde la mezcla era total. En una misma sesión podías ver Escuela de sirenas y Los pájaros, o King Kong (la de 1933) y una de Marisol, Pili y Mili o Rita Pavone, o un film criminal de Eddie Constantine y un western de John Ford. O sea, cine de todas las décadas, de todos los géneros, en blanco y negro y en color. Lo único que unificaba la propuesta de la sala era que siempre eran películas dobladas al castellano y la mala calidad de las copias. Para mí nunca ha sido algo extraño interesarme por un film de los 30 o 40, aunque fuera el cine de la juventud de mis padres, o incluso del cine mudo: se pasaban a menudo cortos de Jaimito (Larry Semon), un cómico completamente olvidado y popularísimo hace años.
De todas maneras, confieso que la cuestión de las listas no me ha interesado nunca, más allá que quizá me pueda permitir descubrir alguna referencia a un film desconocido. Probablemente, lo más interesante de una lista de este tipo es el debate que puede suscitar, más que la lista en sí.