Muy solvente aportacion al genero por parte de un Guy Ritchie que tras Aladdin, quizas su peor pelicula junto con aquella de Madonna, su cambio a un tipo de cine mas austero y menos dinamico visual, no es nada repochable, al contrario, agradecido.

Esta filmada con muy buen pulso, con un Jake Gyllenhaal con su porte habitual y un compañero de reparto solidos, las localizaciones de España hacen pasar por Afghanistan (salvo cierto bar, que se nota que es muy español ) y las secuencias de accion son lo suficientmente bien realizadas, muy en la linea del cine de Peter Berg.

Quizas su segunda mitad no sea tan brillante como la primera, le falla algo ritmo, especialmente tras esa primera parte, pero aun asi, probablemente, sea de lo mejor de este año.