Esto es un fotógrafo profesional al que un matrimonio amigo le invita a cenar y pasar una agradable velada juntos.
El fotógrafo se presenta a la hora convenida y charlan animadamente mientras ven unas cuantas fotos que el invitado ha traído consigo. En esto que la señora comenta:
- ¡Vaya fotos más extraordinarias, debes tener una cámara estupenda!
El fotógrafo se queda pensativo, pero no dice nada.
Al rato se sientan a cenar. Cuando terminan, el fotógrafo satisfecho comenta a la anfitriona:
- ¡La cena ha sido excelente, debes tener una batería de cocina cojonuda!