Hoy en día y siempre se agradece que una película no tenga paja y sintetice la historia aunque sea mala. Porque al menos no buscaban extenderse supongo que por las limitaciones de las bobinas. Hay películas muy buenas cortas y muy malas largas y también antiguas.
A veces uno nunca sabe porque una película dura lo que dura si una quinta parte se la pueden ahorrar.




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) lo cierto es que John Cromwell (1886-1979) tiene varios títulos destacados dentro del cine negro, desde la exótica ARGEL (1938), con Charles Boyer y Hedy Lamarr, pasando por la cinta hoy comentada, la magistral SIN REMISIÓN (1950), con Eleanor Parker (justamente nominada al Oscar a la mejor actriz) hasta llegar a la excelente THE RACKET (1951), con Robert Mitchum, Lizabeth Scott (again!) y Robert Ryan y que supuso el punto y final de su carrera en Hollywoood… hasta su retorno en 1957…









que guasón era.
simplemente expreso mi opinión, querido amigo.












