Es una buena pregunta, porque a partir del momento que Monica activa el programa que David lleva incorporado para amar, el meca "ama" (no puede no hacerlo)... ¿o lo que "siente" el robot no es amor? En los relatos de Aldiss, David duda sobre si sus sentimientos son o no "humanos". En cierta forma, pienso que David quiere ser humano para amar pero sobre todo para poder ser amado, porque constata que el amor que le profesan (tanto Monica como Henry) es, en cierto modo, de segunda mano, un sucedáneo, puesto que es un meca (en Aldiss esa naturaleza no la tiene clara David hasta el momento en que ve los otros miles de niños-robots idénticos, mientras que en el film lo sabe desde el primer momento).
Ahora bien, lo que acaba obteniendo David al final (tanto en el film como en el relato) no es la humanidad sino la capacidad de dormir y de soñar... ¿o es que eso precisamente es lo que define a los humanos, más que no el amor?
Tengo la impresión que hay mucha tela que cortar. Tengamos en cuenta que a Aldiss le acompaña la historia 30 años, y que Kubrick empieza a hablar del proyecto con Aldiss en 1976, o sea 23 años antes de su muerte. Añadamos la intervención de Watson y, por supuesto, la de Spielberg, que evidentemente metió cucharada (él creo que comenta en los extras que no varió en lo esencial el guion preparado por Kubrick pero sí que introdujo alrededor de un centenar de cambios). Todo apunta a unos niveles de notable complejidad narrativa. Ese aspecto es, precisamemente, de lo que más me gusta del film, que no tiene una interpretación simple, que hay que penetrar diferentes capas.