Tema: Humphrey Bogart: revisando sus películas (1941-1956)

Iniciado por Alex Fletcher

Será mi segundo visionado de Casablanca, espero que sea un Blade Runner, o sea, que en su primer visionado me dije, "está bien, pero para una obra maestra", pero en su segundo visionado me tuve que comer mis palabras con patatas y salsa barbacoa (porque se sigue usando ketchup para las patatas fritas cuando la salsa barbacoa le de mil vueltas?). Pues eso, con Casablanca espero lo mismo, primer visionado en glorioso VHS, o sea doblado y en una TV dominicana, o sea culona, ahora se viene el BD y en una TV de traca y mocador, además uno al ver el elenco saliva el doble de lo normal: Lorre, Bogart, la Bergman, Veidt, Rains y Greenstreet..... todo pinta bien!!!!

Yo vi por primera vez Casablanca en algún pase televisivo ochentero y seguramente no estaba preparado para valorar ni degustar las bondades de la misma. Con el formato doméstico, posteriormente, y sobre todo con el BD es cuando se me ha grabado a fuego, cuando me ha picado el veneno (del bueno). Más allá de lo icónico de muchas escenas, frases, etc..., creo que el conjunto del film se adhiere a uno como si de un alien se tratara y ya no hay remedio.

A mí me pasó con muchos clásicos que vi en mi adolescencia y principios de los veinte, y que no supe apreciarlos. Pero que al volver a verlos diez años después por fin estaba en disposición y preparado para reconocer la calidad que atesoran.

Qué decir de Casablanca, es de esas pocas que se pueden decir que son prácticamente perfectas. A mí lo que menos me gusta es el flashback, pero los primeros cuarenta minutos, y los últimos cuarenta minutos son absolutamente magistrales.

Iniciado por tomaszapa

Yo vi por primera vez Casablanca en algún pase televisivo ochentero y seguramente no estaba preparado para valorar ni degustar las bondades de la misma. Con el formato doméstico, posteriormente, y sobre todo con el BD es cuando se me ha grabado a fuego, cuando me ha picado el veneno (del bueno). Más allá de lo icónico de muchas escenas, frases, etc..., creo que el conjunto del film se adhiere a uno como si de un alien se tratara y ya no hay remedio.

A mi me pasó igual, vista por primera vez en tv en los ochenta, me gustó pero no fue para tanto... pero en sucesivos visionados, primero en dvd y luego en bluray fue gustándome cada vez mas y mas. Estoy deseando verla de nuevo.

A mí me gustaba, me gusta y me gustará...

... salvo sorpresas de última hora...

Curiosamente, a veces las películas con un rodaje más caótico se convierten en clásicos inconstestables del mejor cine.

Yo tuve durante años una foto enorme de Bogart y Bergman enmarcada en el comedor. La adoro... a la espera de las siempre temibles revisiones, porque hace años que no la veo.

Iniciado por Alcaudón

A mí me gustaba, me gusta y me gustará...

... salvo sorpresas de última hora...

Curiosamente, a veces las películas con un rodaje más caótico se convierten en clásicos inconstestables del mejor cine.

Seguro que te marcarás otro la ley del silencio!!!!

Au contraire, mon ami.

Iniciado por Alex Fletcher

Seguro que te marcarás otro la ley del silencio!!!!

HIlando con el post de mad dog, yo tengo desde hace unos 12 o más años, un poster que me regalaron en ECI en la época dorada de los dvds, de La ley del silencio, y es más, tengo de perfil en el wasap, el rostro de Brando en ese poster. Y por cierto, al lado izquierdo, en el mes de marzo del calendario de Fotogramas, aparecen bien resguardados en su camarote del barco donde salían a navegar, Bogart y Bacall, charlando animosamente, con libros en las estanterías.

¿Brando en tu perfil? ¿Por qué? Seguro que tú eres más guapo.

Quiero fotos de ese cuadro y del póster...

Iniciado por mad dog earle

¿Brando en tu perfil? ¿Por qué? Seguro que tú eres más guapo.

Estamos ahí, ahí. Pero la foto del Brando malote, preparando el puño derecho, impone. No llega al nivel Putin pero algo hace

Iniciado por cinefilototal

Quiero fotos de ese cuadro y del póster...

Te paso la ubicación de google. A ver si le hago una foto esta tarde o mañana.

07. Casablanca (Casablanca, 1942), de Michael Curtiz



“We’ll always have Paris” …, lo que traducido al lenguaje cinéfilo se convierte en un “siempre nos quedará Casablanca”, no como una referencia a la ciudad marroquí, sino a un lugar de la mente donde se conjugan las emociones. Esa Casablanca es como el Manderley de Rebecca, un lugar en cierto modo fuera del espacio y del tiempo, aunque pese sobre ella el horror de la guerra, y un viejo mapa nos la sitúe en el Marruecos francés, justo debajo del “Spanish Morocco” (recuerdo para desmemoriados del pasado colonial español).



De Casablanca se ha dicho ya, probablemente, todo lo que se puede decir de ella. Se ha analizado hasta el más pequeño de sus detalles y comentado decenas de veces la infinidad de anécdotas generadas durante su producción, comandada por Hal B. Walllis, como productor en proceso de independizarse de la Warner.

A partir de la obra de teatro “Everybody Comes to Rick’s”, de Murray Burnett y Joan Alison, que llevaba años criando polvo, la escritura del guion y las circunstancias del rodaje son material digno de un film. De hecho, de una forma u otra se ha recogido en documentales y alguna película de ficción, una de ellas muy reciente: Curtiz, del director húngaro (aunque nacido en Suiza) Tamas Yvan Topolanszky.

Hasta tres guionistas aparecen acreditados: los hermanos Epstein (Julius y Philip) y Howard Koch, los tres de origen judío, como también lo era el director, el húngaro Michael Curtiz, uno de los directores más prolíficos y exitosos de la Warner. Parece un detalle de justicia poética que uno de los films que más ha perdurado en el imaginario colectivo como muestra del compromiso del ciudadano medio contra el nazismo tuviera en la sala de máquinas (producción, dirección, guion) a un grupo de judíos. Y a diferencia de otro film de la misma época, comentado en el hilo de Renoir, This Land is Mine, ese compromiso se consigue dejando en cierto modo de lado el mensaje didáctico en primer plano, utilizando fundamentalmente los recursos emocionales, a través de una bellísima trama romántica, una de las más brillantes e inolvidables de la historia del cine.

Por supuesto, no voy a desarrollar la sinopsis argumental del film. ¿Quién no lo ha visto varias veces en su vida? En mi caso, son incontables los visionados, desde una primera vez por televisión (sería probablemente un ciclo Bogart de TVE, en los 70) hasta esta última, y siempre con el mismo resultado: la emoción a flor de piel y la fascinación por la bellísima Ilsa (esta y Notorious son mis películas preferidas de la sueca). Porque está “casi todo dicho” sobre Casablanca, me limitaré a recopilar algunos detalles.

Los diálogos: si saludamos los diálogos de The Maltese Falcon, en buena medida procedentes de la novela de Hammett, como extraordinarios, aquí, con tantas manos ocupadas en el guion (a los guionistas acreditados habría que añadir a Wallis, a quien se atribuye la frase final), se hace difícil otorgar autoría concreta a la colección probablemente más reproducida de frases brillantes de la historia del cine (“of all the gin joints, in all the towns, in all the world, she walks into mine”, “kiss me as if it were the last time”,“ round up the usual suspects”, “this is the beginning of a beautiful friendship”). Sorprende cómo un guion que, como el sudario que teje Penélope, se hacía y deshacía de un día para otro, alcance niveles tan elevados de ingenio y agudeza. Y no solo son los diálogos de los personajes principales, sino que todo el reparto tiene frases impagables.

El reparto: como en tantos otros films de la Warner, y en general del Hollywood clásico, el conjunto de actores y actrices de Casablanca es extraordinario. Todos los papeles principales, e incluso muchos de los “secundarios”, están encarnados por actores que parecen haber nacido para el papel. Dejo de lado, de momento, los, para mí, cuatro papeles principales, pero el resto es también digno de elogio: desde el inquietante Conrad Veidt (el inolvidable Cesare de Das Cabinet des Dr. Caligari), como el mayor Strasser,



a la pareja Greenstreet/Lorre, aquí como Ferrari, el propietario del “Blue Parrot”,



y Ugarte, el poseedor de los preciados salvoconductos, respectivamente.



Pero también Sascha, el barman ruso (Leonid Kinskey, ruso como su personaje), o el maître Carl (S.Z. Sakall), pasando por el miembro de la France Libre (como se aprecia en el emblema del anillo), Berger (John Qualen), la joven búlgara (Joy Page) o el croupier (un conocido del hilo de Renoir, Marcel Dalio),



sin olvidar la joven Yvonne (la francesa Madeleine Lebeau) o incluso la cantante (la texana Corinna Mura), interpretando el “Tango delle rose”.

La música: Ya que he citado a Corinna Mura, es inevitable destacar el capítulo musical de Casablanca. Desde la sensacional banda sonora de Max Steiner (ese inicio de sonoridad exótica ya te pone “in the mood”) a la inolvidable interpretación de Sam (Dooley Wilson, que, por cierto, no era pianista, sino batería; un auténtico pianista lo doblaba fuera de campo)) de “As Time Goes By”. “Play it, Sam” (a menudo con el añadido del “again”, gentileza de Woody Allen) se ha convertido también en una frase de uso común.



Los héroes: La película ofrece una de las galerías de héroes más plural y contrastada de la historia del cine. Richard “Rick” Blaine (Bogie borda el papel) es un romántico idealista (que llevó armas a Etiopía, contra los italianos, y combatió en la guerra civil española contra Franco) al que la vida (en particular su experiencia amorosa con Ilsa durante el periodo previo a la entrada de las tropas alemanas en París) ha convertido en un cínico amargado, alguien que por nacionalidad dice ser un “drunkard”, un borracho.



La espina que lleva en lo más profundo de su corazón se la clavó una joven y bellísima noruega, Ilsa (Ingrid Bergman, cedida por David O. Selznick, está irresistible, con esos ojos acuosos, llorosos, pero chispeantes, llenos de vida y de pasión contenida).



El tercero del triángulo amoroso es Victor Laszlo (Paul Henreid, quizá demasiado de una pieza, pero, con todo, con suficientes matices en su registro como para resultar convincente), el héroe inmaculado, en estado puro, casi virginal (solo le vemos besar a la deseable Ilsa dos veces en la mejilla, castos besos más amicales que amorosos). Pero, aunque sea un personaje blando al lado del de Rick, y que sea difícil identificarnos con él (curiosamente, nos es más fácil hacerlo con el cínico propietario del café), tiene un momento de grandeza que no deja indiferente: cuando, sin titubear, hace que la orquesta acalle los cantos de los nazis interpretando una vibrante “La Marseillaise” (eso sí, con el beneplácito de Rick) a la que se suma todo el local, incluida una Yvonne que ha llegado al café del brazo de un alemán. La mirada que le dirige Ilsa nos explica muchas cosas de su relación: es, más que admiración, adoración. No hay duda que no hay himno comparable al francés para poner la piel de gallina. ¿Quién no ha soltado alguna lágrima en este momento del film?



Finalmente, el cuarto “héroe”, aunque sea un héroe todavía más cínico y ambiguo que Rick, el capitán Renault, que interpreta de forma sublime Claude Rains (por la cual recibió una nominación al Oscar, como nos podrá ampliar tomaszapa). Como me pasa con la Bergman, este papel y el de Alex de Notorious son mis preferidos del gran actor británico. Con Renault pasa un poco como le pasa a él respecto a Rick: “Well, Rick is the kind of man that... well, if I were a woman, and I were not around, I should be in love with Rick”. Algo de especial ha de tener una historia para que acabes adorando a personajes tan abyectos como Renault.



El mensaje: Sí, porque a pesar de todo, haberlo, haylo. Es un llamamiento a la sociedad estadounidense a dejar atrás la tibieza de los primeros años de la guerra e implicarse a fondo en la lucha por la libertad y contra el fascismo. Es significativo que la acción se sitúe en los primeros días del mes de diciembre de 1941, poco antes de Pearl Harbor, de manera que el momento en que Rick decide dejar atrás su neutralidad coincida en el tiempo con la entrada de Estados Unidos en la guerra. Y, en un gesto de extraordinaria agudeza, lo hace del brazo del corrupto Renault, todo un recordatorio de que, en la guerra, como luego en la paz, no todo es blanco o negro (salvo quizá personajes como Victor Laszlo y el mayor Strasser).

Podríamos seguir analizando las brillantes soluciones formales puestas en juego por Curtiz, por Arthur Edison como responsable de la fotografía y por todo el equipo técnico, como una iluminación sensacional o unos decorados tan artificiales como efectivos (y alguna famosa pifia, como la gabardina de secado acelerado de Rick ). Como en The Petrified Forest, que hemos comentado en el hilo de Bette Davis, y tantos otros films, el sistema de producción de Hollywood, que primaba el trabajo en estudio, tenía a veces como resultado dotar a las películas de un aire de ensueño, que probablemente sirvió entonces como ahora para favorecer el carácter mítico de tantas y tantas fantasías cinematográficas, por más reales y dolorosas que fueran las experiencias retratadas. Y entre ellas, Casablanca ocupa un lugar de honor, Oscar incluido.

La próxima entrega, siguiendo con esos altos y bajos que continuaba teniendo la carrera de Bogart en la Warner, será Action in the North Atlantic, dirigida por Lloyd Bacon, director extremadamente prolífico y, hoy en día, muy olvidado, que fue quien más veces dirigió a Bogart: hasta en siete ocasiones (pero las seis primeras quedan fuera de esta revisión). La película, una nueva contribución al esfuerzo de guerra mucho más explícita y sin recurrir al recurso del drama romántico, no la he visto nunca, veremos qué nos depara.

Edito: he rectificado también lo de la nominación de Rains.

Difícil dejas el listón, amigo Earle. A ver si se me ocurre algo que añadir. Y además dos entregas en el rincón Renoir y otra en el de Bette Davis. ¿Se me ha escapado alguna más? ¡Qué bárbaro!

Iniciado por Alcaudón

Difícil dejas el listón, amigo Earle. A ver si se me ocurre algo que añadir. Y además dos entregas en el rincón Renoir y otra en el de Bette Davis. ¿Se me ha escapado alguna más? ¡Qué bárbaro!

Sí, el comentario de Ministry of Fear en el hilo de Lang. Por cierto, una curiosidad: estoy viendo la serie Archive 81, bastante interesante hasta ahora, y uno de los personajes aparece vestido con una camiseta de...! Ministry of Fear! A esto le llaman sincronía.

Un póster de Casablanca sin Bogart, pues sino es un montaje, de haberlos "haylos" aunque a uno no le entra dicha disociación, aunque esté la Bergman en la portada, y coincido con Mad que Notoriuos está sensacional, por cierto, muchas flores, muchas flores, pero siempre, injustamente y excepto servidor, por detrás de Vértigo, y Casablanca siendo sus mejores trabajos, tampoco los he visto todos, pero se me hace difícil que lo supere, Ingrid Bergman es la chica normal más bella de todos los tiempos, y cada vez que sale en pantalla en Casablanca se nota, sin desmerecer ni mucho menos al resto de elenco, el cual, como he dicho en mi otro hilo activo, se trata del mejor reparto que he visto hasta ahora. El tema Bergman ya zanjado por falta de adjetivos magnificantes, Humphrey Bogart está fantástico, con la pose de me la suda todo encubierto, una pose que parece que esté cabreado con su país, pero realmente está cabreado con el amor. Ya lo decía Cap. Renault "es un sentimental". Lo de Claude Rains como Cap. Renault, es de 11/10, ese personaje que camina permanentemente en la escala de grises, a él si que se la suda todo lo relacionado con el sentimentalismo y se centra en la teca (excelente escena de 1 segundo cuando recibe su paga en el casino). Sigo con el reparo de campanillas, a mi Laszlo si que me gusta, es más, para variar, me encanta, porque que fácil hubiera sido un duelo de machos para quedarse con el premio Bergman, pero no, como bien indica Mad, se trata de un amor idolatrado, nada carnal, sinceramente es un trío perfecto, si viviera Casablanca en tiempos modernos una escena de cama en trío hubiera funcionado, la chica de enamora carnalmente de Boogie pero de Laszlo como totem, por sus acciones, pensamientos, en resumen por ser buena persona, y si la Bergman tuviera que haber elegido, sin duda, al final, se decante por el guapo que por el bueno.....en fin, la historia de mi vida, siendo yo el bueno natürlich. Y que decir de PEter Lorre!!!! oh me sabe a poco!!!!! con esos andares!!!!!. También destacar al gordi Greenstreet (un film muy automovilístico con Ferrari y Renault) y sobretodo el malo de Conrad Veidt como el Mayor Strasser.



Me fascina su larga intro, sino me falla la memoria, la presentación de los personajes en el restaurante de Rick dura 35 minutos, y sin pasar nada o poco (en cuanto a acción, exteriores....) son magistrales, van apareciendo uno por uno en ese ambiente de vicio y disfrute, miradas por aquí, canciones por allá, diálogos punzantes, dichos 35 se me han hecho muy cortos. Después viene el flashback, que a mi me interesa más por ver donde ocurre y como que su valor romántico que creo que era su objetivo primordial. Un compañero dijo que era el borrón del film, yo pienso que no resta, y lo disfruto, aunque si fuera suprimido no afectaría al film. En el reencuentro privado de ambos Boogie y Bergman, hay algunos gestitos de Bogart de nene despechado que no me gustan mucho, pero bueno es un aire de vinagre dentro de la excelencia.



En cuanto al mensaje, pues uno de los puntos que más me estaba gustando de Renoir era su no posicionamiento y su sutilidad, cosa que en el film comentado en el otro hilo, apenas se aprecia esto, en cambio aquí, aunque como bien dice Mad, el mensaje social está ahí, pero es un mensaje que lo deduces por las acciones de los personajes, el espectador si quiere, deduce el mensaje político, social o lo que fuera del film, y si no quiere, disfruta de una de las obras de arte que el cine ha parido.....y lo dejo aquí que me tengo que ir a trabajar y eso de escribir las reseñas en Word para después, ustedes saben que es mucho trabajo para mi.

Ahí va la frase mítica:

Esos gestos de Rick de "nene despechado" son, precisamente, los que hacen que sea tan fácil identificarse con el personaje, y en cambio sea tan difícil hacerlo con Victor. Porque, quien más quien menos, la mayoría hemos experimentado en algún momento el despecho, pero no la adoración. Despecho, alcohol y lágrimas, y de fondo que suene "As Time Goes By". ¡PLAY IT, SAM!

Magnífica review, mad dog. Ni un profesional hubiera hecho esa maravilla.
Solo un apuntillo: Claude Rains obtuvo nominación, pero el Oscar a mejor actor de reparto ese año fue a parar a manos de Charles Coburn, por El amor llamó dos veces, de George Stevens.
Casablanca obtuvo 3 Oscar: película, director y guión. Además, 5 nominaciones más, entre ellas, Bogart como principal y el referido Rains, como de reparto.
Seguramente la decisión de la Academia de retrasar su elegibilidad a 1943 (cuando se estrena masivamente en los EEUU), en vez de 1942 (en noviembre se estrena solo en Hollywood), la benefició profundamente, porque pasó de una hipotética lucha con La señora Miniver (la gran triunfadora de 1942) a encontrarse un panorama más asequible para lograr lo que logró en 1943.
De todas formas, siempre he leído que fue un milagro el resultado final, y por tanto, esto que comento es otra de esas conjunciones divinas para que algo salga bien.

Iniciado por mad dog earle

Esos gestos de Rick de "nene despechado" son, precisamente, los que hacen que sea tan fácil identificarse con el personaje, y en cambio sea tan difícil hacerlo con Victor. Porque, quien más quien menos, la mayoría hemos experimentado en algún momento el despecho, pero no la adoración. Despecho, alcohol y lágrimas, y de fondo que suene "As Time Goes By". ¡PLAY IT, SAM!

Estoy de acuerdo contigo. Rick nos gusta tanto o más por sus virtudes como por sus defectos, y por eso, es un personaje poliédrico que ama y odia, que ofende y recibe castigo, y con el que nos identificamos plenamente.

Dada el trabajo que se me está acumulando con tanta reseña he empezado a hacerme un esquema para no perder comba.

La cosa quedaría tal que así:

1. Un comentario para "el otro rincón" de una película relativamente actual e incomprensiblemente mitificada.

2. LA MUJER DEL CUADRO

3. CASABLANCA

4. THIS LAND IS MINE

Iniciado por tomaszapa

Solo un apuntillo: Claude Rains obtuvo nominación, pero el Oscar a mejor actor de reparto ese año fue a parar a manos de Charles Coburn, por El amor llamó dos veces, de George Stevens.

Pues lo leí mal, y reconozco que no lo comprobé (ya sabes que no soy muy de premios). Suerte que contamos contigo.
De todas formas, y apreciendo a Coburn como un magnífico actor "de carácter", la interpretación de Rains en Casablanca es sensacional, inolvidable, mítica, mientras que la citada de Coburn ni siquiera creo haberla visto.

Iniciado por mad dog earle

Pues lo leí mal, y reconozco que no lo comprobé (ya sabes que no soy muy de premios). Suerte que contamos contigo.
De todas formas, y apreciendo a Coburn como un magnífico actor "de carácter", la interpretación de Rains en Casablanca es sensacional, inolvidable, mítica, mientras que la citada de Coburn ni siquiera creo haberla visto.

Para la historia ha pasado el personaje de Rains, no hay duda. Pero en aquel momento, Coburn fue destacado porque robaba cada escena en la que aparecía en esa comedia y porque llevaba muchos años ya, desde el teatro hasta el cine, en la profesión.

De perdidos al río...

Dado que de todas formas me voy a retrasar (como es norma ) en la entrega semanal y dado que últimamente andamos here, there and everywhere con programas dobles (o hasta triples) se me ha ocurrido la genial idea de emparejar CASABLANCA con... UNA NOCHE EN CASABLANCA (1946), del incombustible Archie Mayo, dos cintas que presentan importantes nexos de unión... como que la acción transcurra en la citada ciudad marroquí...

Si te buscas "trabajo extra", desde luego no vas a dar abasto.