Harry Potter and the Philosopher's Stone (Chris Columbus, 2001)
Inicio revisión de la saga.
De las grandes sagas freaks-nerds-blockbuster-evasion modelo Star Wars esta es a la que llegué más tarde ya que cuando se estrenó casi a la vez que los Anillos sí acudí a ver esta (quedando colapsado en el cine) pero esta no, viví el fenómeno (imposible escapar de ello) pero no las vi hasta unos pocos años más tarde, tal vez 2003-2004. La primera que vi en el cine fue ya la 4a y de ahí ya todas, inclusive la primera en una reposición el 22 de junio de 2011 (sólo 3 personas en la sala
).
Esta casi que fue a tiro hecho o, cuanto menos, inevitable en su producción: el libro arrasó en 1997 y 1998, David Heyman lideró la idea de adaptar el film y finalmente Warner se hizo con los derechos de los 4 primeros libros por unos 2 millones de dólares.
El libro (los leí en 2010) y el film son un ejemplo procedimental del escapismo puro, del viaje del héro de Joseph Campbell: a saber, Harry vive con sus tios, no tiene padres, es especial/elegido aunque no lo sabe hasta que una figura misteriosa del exterior le cuenta su destino, duda un poco hasta finalmente abrazarlo en un viaje de conocimiento en el que el héroe hace nuevos amigos e inicia su viaje. Y todo ello siendo tan excitante para él como para el espectador en un alarde de honestidad que hace de este tipo de historia, sea Frodo, Luke o Neo, irresistible.
Vamos con lo malo:
-El casting infantil: en anteriores revisiones me los hubiera cargado a todos. A TODOS. Ahora salvo a Emma Watson. Hasta ahora ya la salvaba desde la 3a pues en las dos primeras la encontraba sobre actuada, histérica, agarrándose a muecas, vocalizando de más... Pero aunque sigo, más o menos, viendo eso, en esta ocasión me ha resultado menos cansina, y sin duda hay momentos divertidos en sus caras (por ejemplo cuando Ron y Harry llegan tarde a clase, pone unos ojos
), sobre todo cuando hablan otros personajes.
Pero Radcliffe y Grint... No es que estén mal y además en su imperfección residen encanto pues NO son los clásicos actores infantiles que interpretan como adultos (horrible) pero es evidente, creo, que no tenían el talento necesario y creo que ahí parte de la culpa es de Columbus, que a fin de cuentas debía de sacar lo mejor de esos chavales.
Tom Felton es aún peor. Entiendo su aproximación exagerada, de niño-malo de manual pero esos gestos son demasiado ridículos. Y recordando sus interpretaciones posteriores, a partir de la 3a, no sé yo si es en buena parte culpa de Columbus.
El resto es peor y eso que en esta aún tienen poco papel.
-El síndrome de la batalla de Yavin: es decir, en toda presentación del héroe la mitad del film, aprox, es para ello, y el resto para una primera decisión/batalla etc Es normal que sea menor pero aquí tal vez es poco excitante. Lo digo con ojos de adulto, ojo.
-Aunque está cambiado respecto al libro hay avances en la trama que.... Amén de lo de Hagrid soltando la mitad de pistas (no recuerdo si esto también está cambiado) el mayor avance que se da es cuando los niños son confinados con Hagrid en el bosque prohibido y Harry se encuentra con Firenze y este le suelta casi todo, así, resolviendo todo el misterio.
-La resolución final con Quirrell podría ser algo más épica.
-Percibo ciertas prisas/FX poco pulidos.
Lo bueno:
-Los actores secundarios/adultos, ese plantel británico le da una enjundia al film, un momento Doctor Who de calidad actoral, esa capacidad para soltar con clase textos de cine de escape.
-La BSO de John Williams, maravillosa y al nivel de sus obras cumbres. Lo tiene TODO: un tema central inolvidable y otros que captan la magia necesaria. Si esto me/nos pilla de niños nos sacude bien. Normal que esto fuera el Star Wars de la generación nacida muy a primeros/durante los 90.
En Christmas at Hogwarts VUELVE a parir un villancico, ya lo hizo en Home Alone (aquel Somewhere in my memory)
-El delirante mundo muggle en la exagerada familia Dursley, que no arroja dudas sobre lo premeditado de su comportamiento. No obstante jamás disfruté con ello pero entiendo la idea y el tono.
Todo el maldito viaje hacia la magia en ese momento en el que Obi Wan/Gandalf introduce a las maravillas al joven héroe. Aquí sería Londres, el callejón Diagon, King's Cross, el tren, el castillo, las casas... Irresistible, joder.
El tono infantil es adaptable a un visionado con ojos de adulto porque lo que acontece, como digo, es lo mismo que en otras sagas y sobre todo porque logran que niños, sucesos y diálogos sean permeables en ambos públicos.
El misterio de la piedra, con sus pruebas en las que pueden desarrollar lo que han aprendido durante el curso
Que es una historia de tamaño reducido, ideal para empezar, sin grandilocuencias.