Yo más bien pienso que Cooper y Schoedsack tenían la misma intención que Jackson: impactar al espectador mostrándole algo que no había visto antes. Mostrarle un mundo fantástico poblado de seres fantásticos, mostrarle un gorila gigante interactuando con personajes reales o enfrentándose a bestias prehistóricas, ...todo con el mayor realismo posible. Lo que pasa que en 1933 esto podía ser realmente nuevo y la técnica era la que era. No existía el 3D, ni el CGI, ni el ETC y echaban mano de muñecos de trapo, de plastelina o de algodón. Ahora, en el 2005, la técnica es otra y se recurre a otras herramientas para conseguir lo mismo. Ambos espectadores, los de 1933 y los de 2005 ven sendas versiones de King Kong sabiendo —por supuesto— que ven un mono falso y un escenario falso. Lo que parece suceder es que hoy, viéndola desde el 2005, a la versión del 33 se le disculpa que se le noten los efectos porque son antiguos "y tan entrañables"... Y la versión de Jackson es tan espectacular que ofende. Además, ya estamos hartos de convivir con trucajes en la pantalla. Por supuesto, ya sabemos que es mejor ver a una chica frente a una transparencia donde se ve a un gorila de trapo pelear en un plano fijo, sin cambio de ángulo cámara, con un dinosaurio de plastelina. Todos sabemos que la versión de Gullermin es mejor porque King Kong se ponía cachondo quitándole la ropa a la chica o porque siempre aparecía a oscuras y de noche para que no cantara demasiado el truco de un tipo disfrazado de mono. Jackson la ha cagado: ha mostrado un gorila impresionantemente real desde cualquier ángulo, lo ha mostrado luchando épicamente contra múltiples bestias y desde diversos puntos de vista y lo ha mostrado de día